EL ARTE MODERNO EN ESTOCOLMO
DIRECCIÓN: Ruben Östlund
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO DEL DIRECTOR: 13 de Abril de 1974, Styrsö ( Suecia )
INTÉRPRETES: Claes Bang, Elisabeth Moss, Dominic West, Terry Notary, Christopher Læssø, Marina Schiptjenko, Elijandro Edouard, Daniel Hallberg, Martin Sööder, Linda Anborg, Emelie Beckius, Peter Diaz, Sarah Giercksky, Jan Lindwall
GUIONISTA: Ruben Östlund
FOTOGRAFÍA: Fredrik Wenzel
MÚSICA: Rasmus Thord
GÉNERO: Comedia
PRODUCCIÓN: Plattform Produktion, ARTE France Cinéma, Coproduction Office, Film I Väst, Minorordningen, Nordisk Film- & TV-Fond, Swedish Film Institute, ZDF/Arte, Essential Filmproduktion GmbH
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Avalon Distribución
DURACIÓN: 144 minutos
PREMIOS:4 premios, incluyendo la Palma de oro en el festival de Cannes de 2017
SINOPSIS:
Christian es un padre divorciado que disfruta dedicando su tiempo a sus dos hijas, es un valorado programador de un museo de arte contemporáneo y es de esa clase de personas que conducen un coche eléctrico y respaldan las grandes causas humanitarias. Está preparando su próxima exposición, titulada "The Square", en torno a una instalación que incita a los visitantes al altruismo y les recuerda sus deberes respecto a sus semejantes. Pero cuando a Christian le roban su teléfono móvil, su reacción no le deja precisamente en buen lugar...
( Fuente sinopsis, cartel e imágenes: Avalon Distribución )
( Fuentes información de la película: Filmaffiity, IMDb, Avalon Distribución )
CRÍTICA:
El quinto largometraje de ficción del director sueco Ruben Östlund es su consagración definitiva en el panorama internacional, después de que su anterior trabajo "Fuerza mayor ( 2014 )" se llevara el premio a la mejor película de la sección un Certain regard del festival de Cannes de hace 3 años y también logró colarse en el quinteto de nominadas a la mejor película extranjera en los Globos de oro 2015, siendo derrotada por la cinta rusa "Leviatán ( 2014 )". Pero con " The Square " ha dado un paso más, ya que ha sido premiada con la Palma de oro del pasado festival de Cannes, siendo elegida como la mejor película de la sección oficial por el jurado presidido por Pedro Almodóvar, pese a que curiosamente fue la última película seleccionada y entró a última hora y de tapadillo. Además ha sido de nuevo seleccionada por su país para luchar por el premio Óscar 2018 en la categoría de película de habla no inglesa.
La repercusión del premio obtenido en el prestigioso festival francés hace que la película sea una d ellas más esperada por los cinéticos de todo el mundo, y en mi caso tuve la suerte de poder verla en el pasado festival de cine de San Sebastián, en donde fue incluida en la sección Zabaltegi-Tabakalera y no, como era de esperar en la sección Perlas que acoge casi todos los años a la ganadora de la Palma de oro, y según palabras de José Luis Rebordinos encajaba menos por su temática y relación con el arte en una sección que se proyecta y lleva el nombre del centro de arte y exposiciones Tabakalera.
La película me decepcionó, teniendo en cuenta que me gusta la anterior película del director ( no he visto sus 3 primeros largometrajes ), y que la temática era interesante, así como las elevadas expectativas después de ser la triunfadora en Cannes. La historia se desarrolla en un museo de arte moderno de Estocolmo y está basada en la experiencia personal del director tras una exhibición de arte creada en el 2015 por Ruben Östlund y Kalle Boman en el museo de diseño Vandalorum en Värnamo. En declaraciones del propio Östlund " esta exposición exploraba la idea de instalar santuarios ( un cuadrado físico situado en la plaza de la ciudad, en donde la igualdad de derechos y obligaciones debe prevalecer ) humanitarios en el centro de cada ciudad en Suecia. El título de la película hace referencia a la colocación de un cuadrado, en medio de la plaza situada en los exteriores de ese museo de arte moderno, como otra exposición más de ese lugar.
La película es arriesgada a nivel formal y de guión, ya que huye de los convencionalismo y se introduce en el corazón del arte moderno para hacer una crítica al sistema, poniendo su punto de mira en un Museo de Arte moderno de Suecia y en Christian, su director bastante inoperante y que no sabe llevar su vida personal y su trabajo en el museo. Claes Bang es el gran protagonista y está presente casi todo el rato intentando mantener a flote un lugar en donde su última exposición " The square " es lo que da título a la película.
CRÍTICA:
El quinto largometraje de ficción del director sueco Ruben Östlund es su consagración definitiva en el panorama internacional, después de que su anterior trabajo "Fuerza mayor ( 2014 )" se llevara el premio a la mejor película de la sección un Certain regard del festival de Cannes de hace 3 años y también logró colarse en el quinteto de nominadas a la mejor película extranjera en los Globos de oro 2015, siendo derrotada por la cinta rusa "Leviatán ( 2014 )". Pero con " The Square " ha dado un paso más, ya que ha sido premiada con la Palma de oro del pasado festival de Cannes, siendo elegida como la mejor película de la sección oficial por el jurado presidido por Pedro Almodóvar, pese a que curiosamente fue la última película seleccionada y entró a última hora y de tapadillo. Además ha sido de nuevo seleccionada por su país para luchar por el premio Óscar 2018 en la categoría de película de habla no inglesa.
La repercusión del premio obtenido en el prestigioso festival francés hace que la película sea una d ellas más esperada por los cinéticos de todo el mundo, y en mi caso tuve la suerte de poder verla en el pasado festival de cine de San Sebastián, en donde fue incluida en la sección Zabaltegi-Tabakalera y no, como era de esperar en la sección Perlas que acoge casi todos los años a la ganadora de la Palma de oro, y según palabras de José Luis Rebordinos encajaba menos por su temática y relación con el arte en una sección que se proyecta y lleva el nombre del centro de arte y exposiciones Tabakalera.
La película me decepcionó, teniendo en cuenta que me gusta la anterior película del director ( no he visto sus 3 primeros largometrajes ), y que la temática era interesante, así como las elevadas expectativas después de ser la triunfadora en Cannes. La historia se desarrolla en un museo de arte moderno de Estocolmo y está basada en la experiencia personal del director tras una exhibición de arte creada en el 2015 por Ruben Östlund y Kalle Boman en el museo de diseño Vandalorum en Värnamo. En declaraciones del propio Östlund " esta exposición exploraba la idea de instalar santuarios ( un cuadrado físico situado en la plaza de la ciudad, en donde la igualdad de derechos y obligaciones debe prevalecer ) humanitarios en el centro de cada ciudad en Suecia. El título de la película hace referencia a la colocación de un cuadrado, en medio de la plaza situada en los exteriores de ese museo de arte moderno, como otra exposición más de ese lugar.
La película es arriesgada a nivel formal y de guión, ya que huye de los convencionalismo y se introduce en el corazón del arte moderno para hacer una crítica al sistema, poniendo su punto de mira en un Museo de Arte moderno de Suecia y en Christian, su director bastante inoperante y que no sabe llevar su vida personal y su trabajo en el museo. Claes Bang es el gran protagonista y está presente casi todo el rato intentando mantener a flote un lugar en donde su última exposición " The square " es lo que da título a la película.
Tiene unos cuantos momentos de humor, aunque personalmente no me hicieron reír salvo dos de manera aislada, que rozan el absurdo y no terminé de entrar en esa manera tan exagerada de contar la vida en el interior de ese museo, a lo que podemos sumar una situación personal que le sucede al protagonista que terminará siendo el punto de partida de la historia. Elizabeth Moss tiene un papel muy secundario y en cada una de sus apariciones demuestra su capacidad interpretativa de manera natural. El otro rostro conocido es el del británico Dominic West, otro actor que saltó a la fama por un personaje televisivo, al igual que la actriz norteamericana citada anteriormente.
La película es irreverente, tiene un buen planteamiento inicial y vive de situaciones aisladas que funcionan bastante bien, pero en general se excede en alargar los momentos cómicos, que funcionarían mejor si se acortaran y así conseguirían su objetivo de criticar el inconformismo de la sociedad europea y a las instituciones culturales, en este caso un museo de arte moderno. Las dos apariciones de Dominic West son dos escenas que me llegaron a irritar por ser excesivas y llegar a extremos innecesarios.
Los que hemos visto bastante cine clásico nos hemos reído mucho más con situaciones cómicas de planteamiento similar pero mejor desarrolladas, y en algunos momentos su intento de hacer reír me recordó a películas de LaCava o Sturges. Tiene muchas similitudes con "Toni Erdmann ( 2016 )", que también se proyectó al año pasado en el primer día del Zinemaldia, y que usaba un humor exagerado con escenas alargadas, como vehículo para contar una historia de personajes con poder económico, pero con una vida personal bastante mejorable ( comparo a la protagonista de esa cinta alemana con Christian, el protagonista de " The square " ). En ambos casos las películas no se hacen largas, pese a que duran 160 y 144 minutos respectivamente, pero creo que se podía haber recortado algo la duración en algunas escenas cómicas.
Está claro que el director sabe rodar muy bien, que quiere alejarse del cine convencional, y tiene una buena fotografía que se pone de manifiesto en una situación al final en donde se enfoca a los personajes que van subiendo por una escalera. No es una mala película y gustará mucho a cierto tipo de público, pero esperaba más de la ganadora de la Palma de oro, y veo difícil que los académicos la tengan en cuenta para incluirla en el quinteto de nominados en la categoría de película de habla no inglesa. Eso sí, será una de las grandes protagonistas de los próximos premios EFA ( premios del cine europeo ), cuyas nominaciones conoceremos mañana sábado en Sevilla, coincidiendo con el inicio del festival de cine europeo que se celebra en esa ciudad del sur de España.
LO PEOR: No funciona como comedia y las dos escenas en las que aparece Dominic West están alargadas innecesariamente.
TRAILER: