LA LITERATURA COMO MÉTODO DE EVASIÓN EN PERIODO BÉLICO
TÍTULO ORIGINAL: The Guernsey Literary and Potato Peel Pie Society
DIRECCIÓN: Mike Newell
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO DEL DIRECTOR: 28 de Marzo de 1942, St. Albans ( Reino Unido )
INTÉRPRETES: Lily James, Michiel Huisman, Glen Powell, Jessica Brown Findlay, Matthew Goode, Tom Courtenay, Penelope Wilton, Tim Ingall, Katherine Parkinson, Kit Connor,Dilyana Bouklieva, Andy Gathergood, Marek Oravec
GUIONISTAS: Thomas Bezucha, Don Roos
BASADA EN: La novela homónima escrita por Annie Barrows y Mary Ann Shaffer en 2008
FOTOGRAFÍA: Zac Nicholson
MÚSICA: Alexandra Harwood
GÉNERO: Drama
PRODUCCIÓN: Blueprint Pictures, Mazur, Kaplan Company, Amazon Prime Video, Canal+, Cine+, StudioCanal
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: A Contracorriente Films
DURACIÓN: 123 minutos
SINOPSIS:
Mientras la ciudad de Londres empieza a recuperarse tras la Segunda Guerra Mundial, la joven escritora Juliet Ashton busca el argumento para su próximo libro. Un día recibe una carta de un desconocido en la que le presenta a un curioso club de lectura: La Sociedad Literaria y del Pastel de Piel de Patata de Guernsey. Intrigada por estos excéntricos personajes, Juliet decide viajar a esta pequeña isla, sin saber que encontrará mucho más que una gran historia.
DURACIÓN: 123 minutos
SINOPSIS:
Mientras la ciudad de Londres empieza a recuperarse tras la Segunda Guerra Mundial, la joven escritora Juliet Ashton busca el argumento para su próximo libro. Un día recibe una carta de un desconocido en la que le presenta a un curioso club de lectura: La Sociedad Literaria y del Pastel de Piel de Patata de Guernsey. Intrigada por estos excéntricos personajes, Juliet decide viajar a esta pequeña isla, sin saber que encontrará mucho más que una gran historia.
( Fuente sinopsis y cartel: A Contracorriente Films, Image.net )
( Fuentes imágenes: Image.net-A Contracorriente Films, IMDb )
( Fuentes imágenes: Image.net-A Contracorriente Films, IMDb )
( Fuentes información de la película: Filmaffinity, A Contracorriente Films, IMDb )
CRÍTICA:
El británico Mike Newell lleva más de 5 décadas dirigiendo películas y a sus 76 años nos presenta una interesante y notable propuesta, que tiene casi todos los elementos de su cine anterior, y que mezcla diferentes géneros, en especial el melodrama romántico con toques de humor ( aunque menos que en otras películas como " Cuatro bodas y un funeral ( 1994 ) " ).
La película se presentó en nuestro país ´la pasada Primavera en Barcelona, ya que formó parte de la sección oficial del BCN Film Festival.
Se podrá criticar, y no les faltará razón a los que lo hagan, por ser bastante convencional, previsible e incluso algo edulcorada, pero para seguidores del género como es mi caso poco importan esos defectos ya que, reconociendo esos defectos y que podía haber sido más redonda, es un placer culpable y tanto en los paisajes, como en la ambientación, la música y las historias personales, conecté, y no se me hicieron largas esas dos horas. La película tiene alguna situaciones divertidas, pese a que en el fondo es una historia dramática.
La propuesta está basada en una novela reciente, escrita por Annie Barrows y Mary Ann Shaffer en 2008, y se inicia con un prólogo que se desarrolla en 1941, durante la II guerra mundial, y a partir de aquí avanza unos años hasta 1946, una vez finalizado el conflicto bélico para situar la acción en Londres con el personaje de Juliet, una escritora que está comprometida con un norteamericano, y que por una casualidad conoce a los personajes que aparecen en esa historia inicial y decide acudir a la isla de Guernsey, para conocer esas historias personales que, desde ese momento, vamos conociendo y hace que la escritora empatice con ese grupo de personas que forman esa sociedad literaria que da título a la película y surge un posible amor. La actriz británica, una de las mejores de su generación, está bastante bien y llena la pantalla con su sonrisa y mirada, pero también está creíble en los momentos más dramáticos. Uno de los puntos fuertes de la película es su reparto, ya que entre los secundarios de lujo encontramos a Tom Courtenay y Penelope Wilton. El primero tiene un personaje que es bastante plano y de poca importancia, a diferencia de la segunda como Amelia y es uno de los puntos fuertes de la película.
CRÍTICA:
El británico Mike Newell lleva más de 5 décadas dirigiendo películas y a sus 76 años nos presenta una interesante y notable propuesta, que tiene casi todos los elementos de su cine anterior, y que mezcla diferentes géneros, en especial el melodrama romántico con toques de humor ( aunque menos que en otras películas como " Cuatro bodas y un funeral ( 1994 ) " ).
La película se presentó en nuestro país ´la pasada Primavera en Barcelona, ya que formó parte de la sección oficial del BCN Film Festival.
Se podrá criticar, y no les faltará razón a los que lo hagan, por ser bastante convencional, previsible e incluso algo edulcorada, pero para seguidores del género como es mi caso poco importan esos defectos ya que, reconociendo esos defectos y que podía haber sido más redonda, es un placer culpable y tanto en los paisajes, como en la ambientación, la música y las historias personales, conecté, y no se me hicieron largas esas dos horas. La película tiene alguna situaciones divertidas, pese a que en el fondo es una historia dramática.
La propuesta está basada en una novela reciente, escrita por Annie Barrows y Mary Ann Shaffer en 2008, y se inicia con un prólogo que se desarrolla en 1941, durante la II guerra mundial, y a partir de aquí avanza unos años hasta 1946, una vez finalizado el conflicto bélico para situar la acción en Londres con el personaje de Juliet, una escritora que está comprometida con un norteamericano, y que por una casualidad conoce a los personajes que aparecen en esa historia inicial y decide acudir a la isla de Guernsey, para conocer esas historias personales que, desde ese momento, vamos conociendo y hace que la escritora empatice con ese grupo de personas que forman esa sociedad literaria que da título a la película y surge un posible amor. La actriz británica, una de las mejores de su generación, está bastante bien y llena la pantalla con su sonrisa y mirada, pero también está creíble en los momentos más dramáticos. Uno de los puntos fuertes de la película es su reparto, ya que entre los secundarios de lujo encontramos a Tom Courtenay y Penelope Wilton. El primero tiene un personaje que es bastante plano y de poca importancia, a diferencia de la segunda como Amelia y es uno de los puntos fuertes de la película.
Glen Powell interpreta a Mark, el novio de la protagonista, Matthew Goode el editor y representante de la escritora. Dejo para el final a Michiel Huisman que es el joven miembro de esa sociedad literaria, y que comienza a tener una relación especial con la protagonista, en donde sale a relucir un enigma de su pasado que terminará siendo uno de los asuntos centrales de la segunda mitad. El intérprete no me termina de convencer y desaprovecha la oportunidad en un personaje que daba para mostrar algo más de carácter.
La película está bastante bien a nivel artístico, y se nota que es una producción británica, con una gran recreación de la época y un buen diseño de vestuario. La fotografía no es nada del otro mundo, pero me parece un acierto la elección del lugar en donde se desarrolla la historia con unos paisajes de gran belleza. También me gusta los momentos en los que hay una elipsis temporal para mostrar algún detalle del pasado de los personajes que es importante para entender lo que sucede en ese momento. Una película que me interesó hasta el final, pero es verdad que se podía haber recortado algo de metraje. No me convence el desenlace que es previsible, y creo que la película puede gustar bastante al público medio aficionado a los melodramas de época británicos.
LO MEJOR: El reparto, en especial Penelope Wilton y Lily James. La recreación de la época.
LO PEOR: El final es previsible y se alarga en exceso.
LA OCUPACIÓN DE GUERNSEY:
El Dr. Jason Monaghan, Jefe del Servicio de Patrimonio del Gobierno de Guernsey es un experto en la ocupación, y nos informó sobre los elementos más destacados de la ocupación alemana de las Islas del Canal.
Las tropas inglesas y francesas que combatían contra la Alemania nazi sufrieron una derrota imprevista en mayo de 1940. Francia se rindió a los alemanes, y fue ocupada por el ejército alemán, con lo cual la fuerza aérea alemana, la Luftwaffe, puedo establecer bases en el litoral francés. Esto significaba que las Islas del Canal no podían ser defendidas, por lo cual las tropas británicas se retiraron y las islas fueron “desmilitrizadas”. El enemigo lo supo demasiado tarde, así que todavía se produjo un bombardeo de la Luftwaffe sobre el puerto de St. Peter el 28 de junio. Hay un monumento en White Rock que recuerda las 23 víctimas del bombardeo.
Casi toda la población de Alderney fue evacuada a Inglaterra, así como 17.000 personas de Guernsey. Quedaron 25.000 habitantes. El ejército alemán hizo planes para una invasión de las islas, pero el 30 de junio un piloto de la Luftwaffe aterrizó con su avión en Guernsey y constató que la isla carecía de defensas. Guernsey se rindió a los invasores al día siguiente.
Durante el resto de la guerra las islas estuvieron ocupadas por el enemigo. La resistencia era imposible en un lugar tan pequeño, en el que había un soldado por cada dos habitantes. Los que se atrevían a desafiar a los alemanes eran enviados a campos de prisioneros, y las tres mujeres judías que vivían en Guernsey fueron evacuadas por los nazis, para acabar muriendo en Auschwitz. Dos soldados naturales de Guernsey y enviados para espiar consiguieron escapar al pelotón de fusilamiento porque el comandante alemán, von Schmettow, decidió que debían ser tratados como prisioneros de guerra. Las radios fueron confiscadas y se le prohibió a la gente frecuentar las playas.
Los barcos de pesca solo podían salir a faenar con un guardia a bordo, para impedir que los hombres huyesen. Sin embargo, Guernsey eludió la crueldd y la destrucción que padecieron otros países de Europa. Adolf Hitler quería usar la ocupación de las Islas del Canal para mostrarles a los británicos lo civilizados que podían ser los alemanes. Muchos soldados también estaban contentos por estar en un lugar en el que no había combate, y muchos de ellos regresaron cuando la guerra hubo acabado.
Los alemanes habían decidido impedir que los británicos recuperasen las islas, así que destacaron a 37.000 soldados con artillería, aviones, barcos y tanques. llenaron la isla de bunkers, trincheras, torres y posiciones de artillería, algunos de los cuales se pueden visitar hoy en día. Se usaron esclavos procedentes de Rusia y de otros países ocupados para construir estas fortificaciones y muchos murieron por las malas condiciones de vida en las que se les mantenía. Las fortificaciones, sin embargo, nunca sirvieron para nada.
Los británicos únicamente lanzaron unos pequeños ataques contra las islas con comandos o con bombarderos, con la intención sobre todo de molestar a los alemanes o de obtener información. Hubo un plan para una gran invasión, pero afortunadamente no se llevó a cabo porque Guernsey hubiese quedado destrozada y muchos de sus habitantes hubiesen muerto.
Durante 1942 y 1943 unos 2.000 habitantes de las islas fueron deportados a campos en Alemania. La mayoría de los deportados de Guernsey fueron a Biberbach, y transcurrieron el resto de la guerra detrás de una alambrada. Para la gente que permaneció en la isla, las cosas se pusieron peores con el paso del tiempo. Era imposible encontrar cosas normales como neumáticos de bicicleta o juguetes para los niños. La comida empezó a escasear y la criminalidad aumentó.
En junio de 1944 los aliados desembarcaron en Normandía y empezó la reconquista de Francia. A partir de ese momento los alemanes en la isla quedaron desconectados, y se interrumpieron los suministros de comida, carbón y medicinas. Ese invierno tanto los isleños como las fuerzas de ocupación estaban cercanos a la inanición por hambre, y ya estaban comiendo algas. La salvación llegó con paquetes de comida de la Cruz Roja a bordo del barco Vega.
El 8 de mayo de 1945 la guerra concluyó en Europa y los británicos enviaron al barco HMS Bulldog a Guernsey para aceptar la rendición de las fuerzas alemanas. El 9 de mayo soldados británicos de la Grupo 135 (el código que recibió la fuerza militar destacada) desembarcaron y tomaron el control de la isla. La ocupación ha perdurado en la memoria del los habitantes de las islas, y el 9 de mayo se conmemora como Día de la Liberación.
Los alemanes habían decidido impedir que los británicos recuperasen las islas, así que destacaron a 37.000 soldados con artillería, aviones, barcos y tanques. llenaron la isla de bunkers, trincheras, torres y posiciones de artillería, algunos de los cuales se pueden visitar hoy en día. Se usaron esclavos procedentes de Rusia y de otros países ocupados para construir estas fortificaciones y muchos murieron por las malas condiciones de vida en las que se les mantenía. Las fortificaciones, sin embargo, nunca sirvieron para nada.
Los británicos únicamente lanzaron unos pequeños ataques contra las islas con comandos o con bombarderos, con la intención sobre todo de molestar a los alemanes o de obtener información. Hubo un plan para una gran invasión, pero afortunadamente no se llevó a cabo porque Guernsey hubiese quedado destrozada y muchos de sus habitantes hubiesen muerto.
Durante 1942 y 1943 unos 2.000 habitantes de las islas fueron deportados a campos en Alemania. La mayoría de los deportados de Guernsey fueron a Biberbach, y transcurrieron el resto de la guerra detrás de una alambrada. Para la gente que permaneció en la isla, las cosas se pusieron peores con el paso del tiempo. Era imposible encontrar cosas normales como neumáticos de bicicleta o juguetes para los niños. La comida empezó a escasear y la criminalidad aumentó.
En junio de 1944 los aliados desembarcaron en Normandía y empezó la reconquista de Francia. A partir de ese momento los alemanes en la isla quedaron desconectados, y se interrumpieron los suministros de comida, carbón y medicinas. Ese invierno tanto los isleños como las fuerzas de ocupación estaban cercanos a la inanición por hambre, y ya estaban comiendo algas. La salvación llegó con paquetes de comida de la Cruz Roja a bordo del barco Vega.
El 8 de mayo de 1945 la guerra concluyó en Europa y los británicos enviaron al barco HMS Bulldog a Guernsey para aceptar la rendición de las fuerzas alemanas. El 9 de mayo soldados británicos de la Grupo 135 (el código que recibió la fuerza militar destacada) desembarcaron y tomaron el control de la isla. La ocupación ha perdurado en la memoria del los habitantes de las islas, y el 9 de mayo se conmemora como Día de la Liberación.