LLEGAR HASTA EL FINAL
TÍTULO ORIGINAL: A Private War
DIRECCIÓN: Matthew Heineman
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO DEL DIRECTOR: 30 de Noviembre de 1983, Washington D. C. ( Estados Unidos )
INTÉRPRETES: Rosamund Pike, Jamie Dornan, Tom Hollander, Jesuthasan Antonythasan,Pano Masti, Stanley Tucci, Alexandra Moen, Corey Johnson, Hilton McRae,Raad Rawi
GUIONISTAS: Arash Amel, Marie Brenner
FOTOGRAFÍA: Robert Richardson
MÚSICA: H. Scott Salinas
GÉNERO: Bélica
PRODUCCIÓN: Aviron Pictures, Acacia Filmed Entertainment, Denver and Delilah Productions, Savvy Media Holdings, Thunder Road Pictures
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: DeAPlaneta
DURACIÓN: 110 minutos
PREMIOS: 2 premios en los HMMA de 2018
Marie Colvin ( Rosamund Pike ), una de las corresponsales de guerra más famosas de nuestra historia reciente, no le tiene miedo a nada y arriesga su vida a diario para dar voz a las víctimas de la guerra desde primera línea de batalla. Durante los primeros años se siente cómoda compartiendo martinis con la élite de Londres mientras combate dictadores en todo el mundo. Pero los distintos traumas que va acumulando en cada nueva misión acaban tomando el control de su vida personal, que poco a poco se va desmoronando. Aun así, su empeño en mostrar el lado más cruel de la guerra le lleva a embarcarse en la misión más peligrosa de toda su carrera en la ciudad sitiada de Homs, Siria.
( Fuente sinopsis, cartel e imágenes: DeAPlaneta )
CRÍTICA:
Matthew Heineman es un director de cine, que hasta la fecha solo había dirigido documentales, dentro del mundo del documental está catalogado como uno de los mejores. Ahora nos presenta su primera película de ficción, un biopic sobre la periodista de guerra Marie Colvin. Entre los anteriores trabajos del director podemos destacar “City of Ghosts” y “Cartel Land”. La película estuvo al principio en la carrera de los premios internacionales, con alguna nominación a los globos de oro, pero no paso de ahí.
La historia se centra en la corresponsal de guerra Marie Colvin, nos van mostrando los diferentes conflictos en los que ha estado, desde que empezó en el año 1986 cuando entrevistó a Muamar Gadafi poco después de que Libia fuera bombardeada por Estados Unidos. Posteriormente en el año 1999, durante la crisis de Timor Oriental se negó a abandonar el país y sus reportajes ayudaron a salvar a más de 1500 mujeres y niños refugiados.
En el año 2001 mientras cubría la guerra civil de Sri Lnaka, perdió un ojo debido al impacto de una granada, años más tarde ayudo a descubrir en Irak una foca común y finalmente su destino final, cuando el 22 de febrero de 2012, moría en la ciudad Siria de Homs, víctima de un ataque de la artillería al poco de denunciar públicamente y en directo lo que para ella era el peor conflicto bélico que había cubierto nunca.
Todos lo que vamos viendo esta dirigido de una manera impecable, nos muestra muy bien el peligro y el miedo, entiendes muy bien el odio y la barbarie de la guerra. A medida que va transcurriendo la película empiezas a ver la compleja personalidad del personaje, sus tramas, el miedo que pasaba y te preguntas porque lo hacía, porque tenía esa necesidad de jugarse la vida. Refleja, aunque el espectador no lo entienda, esa obsesión por jugarse la vida.
Todo el peso de la cinta lo lleva Rosamund Pike, tiene una actuación memorable, en todo momento está acompañada por su fotógrafo, papel interpretado por Paul Conroy. La película es valiente y arriesgada, combina momentos de ficción con otros que parecen más un documental. Recomendable para conocer la vida de esta periodista que dio su vida para que todo el mundo conociera la verdad.
Puntuación: 7.5/10
LO MEJOR: El trabajo interpretativo de Rosamund Pike.La historia se centra en la corresponsal de guerra Marie Colvin, nos van mostrando los diferentes conflictos en los que ha estado, desde que empezó en el año 1986 cuando entrevistó a Muamar Gadafi poco después de que Libia fuera bombardeada por Estados Unidos. Posteriormente en el año 1999, durante la crisis de Timor Oriental se negó a abandonar el país y sus reportajes ayudaron a salvar a más de 1500 mujeres y niños refugiados.
En el año 2001 mientras cubría la guerra civil de Sri Lnaka, perdió un ojo debido al impacto de una granada, años más tarde ayudo a descubrir en Irak una foca común y finalmente su destino final, cuando el 22 de febrero de 2012, moría en la ciudad Siria de Homs, víctima de un ataque de la artillería al poco de denunciar públicamente y en directo lo que para ella era el peor conflicto bélico que había cubierto nunca.
Todos lo que vamos viendo esta dirigido de una manera impecable, nos muestra muy bien el peligro y el miedo, entiendes muy bien el odio y la barbarie de la guerra. A medida que va transcurriendo la película empiezas a ver la compleja personalidad del personaje, sus tramas, el miedo que pasaba y te preguntas porque lo hacía, porque tenía esa necesidad de jugarse la vida. Refleja, aunque el espectador no lo entienda, esa obsesión por jugarse la vida.
Todo el peso de la cinta lo lleva Rosamund Pike, tiene una actuación memorable, en todo momento está acompañada por su fotógrafo, papel interpretado por Paul Conroy. La película es valiente y arriesgada, combina momentos de ficción con otros que parecen más un documental. Recomendable para conocer la vida de esta periodista que dio su vida para que todo el mundo conociera la verdad.
Puntuación: 7.5/10
LO PEOR: Algún guiño que meten sobre el periodismo y que sobra.
( Crítica escrita por Christopher Laso )
CRÍTICAS EN BLOGS ESPECIALIZADOS:
Pedro de Frutos en El Ónfalos
Pedro de Frutos en Coveralia
Javier Gutiérrez en Cine de Patio
PODCASTS:
DÍAS DE CINE:
NOTAS DEL DIRECTOR:
Estamos en la era de la posverdad, en la que los hechos se distorsionan y dictadores, terroristas y políticos utilizan la propaganda en su beneficio personal. El resultado es aterrador: la gente a menudo no sabe qué o a quién creer. Los datos se han convertido en algo maleable. El periodismo está siendo atacado y está cada vez más polarizado. El discurso mediático se manipula y los bulos se construyen como “noticias” que se presentan como investigaciones reales.
Me preocupa mucho la amenaza que esto supone para nuestra sociedad y, por eso, he querido rodar A Private War, sobre la mítica corresponsal de guerra Marie Colvin. Ella fue una de la periodistas más reconocidas de nuestra época. Una mujer valiente y rebelde, dispuesta a arriesgarlo todo por contar una historia. Demostró tener nervios de acero en situaciones de peligro, y destacaba por su deseo de contar de primera mano el sufrimiento que causa la guerra. Quería que el mundo fuera tan consciente como ella de las terribles atrocidades que tan a menudo ignoramos.
Estar tan expuesta a tanto sufrimiento fue haciendo mella en ella y empezó a perder el control sobre su vida personal. Se dice que los reporteros de guerra se vuelven adictos a los conflictos, y en su caso sin duda fue así. Los conflictos eran una especie de droga de la que no podía escapar. Paradójicamente, la guerra a menudo fue su refugio.
A Private War es mi primera película de ficción. Al plantear la historia de Marie, me identifiqué inmediatamente con su deseo de ponerle cara a los conflictos. Ha sido uno de los objetivos que siempre me he marcado durante mi carrera como director de documentales. Fue el motor de Cartel Land ( Tierra de cárteles ), sobre un grupo de vigilantes que intentaron frenar el tráfico de drogas en México, y de City of Ghosts, que daba voz a los periodistas-ciudadanos que documentaban los horrores que cometía el ISIS en sus pueblos natales en Siria. Al igual que Marie, he sentido ese subidón extraño que produce informar sobre la guerra y también he tenido que lidiar con los oscuros pensamientos que inevitablemente acompañan a este trabajo.
A Private War celebra el periodismo y la figura de Marie, que arriesgó su vida una y otra vez para contar una verdad que muchos no queremos oír. Para mí ha sido muy importante detenerme en la vida personal de Marie y por ello he intentado analizar también sus conflictos internos. No quería plantear la película como un biopic, sino estudiar cómo esas adicciones tan paradójicas hacían de Marie una periodista brillante y un alma torturada que a menudo se preguntaba si al mundo le interesarían las cosas que ella contaba.