EL MUNDO CRIMINAL EN BROOKLYN
PAÍS: Estados Unidos (2019)
TÍTULO ORIGINAL: Motherless Brooklyn
DIRECCIÓN: Edward Norton
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO DEL DIRECTOR: 18 de Agosto de 1969, Boston (Estados Unidos)
INTÉRPRETES: Edward Norton, Bruce Willis, Willem Dafoe, Bobby Cannavale, Alec Baldwin, Leslie Mann, Gugu Mbatha-Raw, Ethan Suplee, Dallas Roberts, Michael Kenneth Williams, Fisher Stevens, Cherry Jones, Josh Pais, Robert Wisdom, Candace Smith, Doris McCarthy, Courtney Gonzalez
GUIONISTA: Edward Norton
BASADA EN: La novela homónima escrita por Jonathan Lethem, y publicada en 1999
FOTOGRAFÍA: Dick Pope
MÚSICA: Daniel Pemberton
GÉNERO: Cine Negro
PRODUCCIÓN: Warner Bros, Class 5 Films, MWM Writing Pictures
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Warner Bros Pictures
DURACIÓN: 144 minutos
PREMIOS:2 premios, en los Satellite awards 2019
SINOPSIS:
Situada en la Nueva York de los años 50, «Huérfanos de Brooklyn» narra cómo Lionel Essrog (Edward Norton), un solitario detective privado que sufre del síndrome de Tourette, decide tomar cartas en el asunto e intenta resolver el asesinato de Frank Minn (Bruce Willis), su mentor y único amigo. Con solo algunas pistas y la poderosa herramienta que es su mente obsesiva, Lionel desentraña secretos que ponen en jaque el destino de toda la ciudad y que hasta ahora habían sido celosamente guardados. Intentando resolver este misterio, que lo llevará de clubs de jazz de Harlem que apestan a ginebra y los duros barrios marginales de Brooklyn a los relucientes salones de los más poderosos e influyentes de Nueva York, Lionel se enfrentará a matones, corruptos y al hombre más peligroso de toda la ciudad por su lealtad hacia su amigo y para salvar a la mujer que es, a su vez, su única posibilidad de salvación.
(Fuente de la sinopsis: Warner Bros Pictures Spain)
(Fuente del cartel y las imágenes: Sensacine)
(Fuentes de la información de la película: Filmaffinity, Warner Bros Pictures, IMDb)
CRÍTICA:
El actor norteamericano Edward Norton dirige su segundo largometraje, 19 años después de su ópera prima, en la adaptación de la novela homónima escrita por Jonathan Lethem. No es sencillo adaptar una novela, y mucho menos una tan compleja como "Motherless Brooklyn", y el intéprete tres veces candidato al Óscar lo ha conseguido a medias, ya que el proyecto es magnífico a nivel técnico, artístico e interpretativo, pero la película no termina de funcionar a nivel de guion, sobre todo en el desarrollo de las historias de algunos personajes secundarios.
La propuesta se presentó en la pasada edición del festival de Telluride y posteriormente tuvo una proyección en Toronto. La película tuvo una importancia menor de la esparada por Warner Bros Pictures en la pasada temporada de premios norteamericanos, y se tuvo que conformar, dentro de los premios de prestigio, con dos Satellite y una candidatura a los Globos de oro en la categoría de banda sonora.
La historia de la película se desarrolla en la década de los 50 en Nueva York y tiene un gran arranque, con un prólogo muy intrigante y que tiene un desenlce sorprendente.
A partir de ese momento la propuesta se centra en el personaje del detective Lionel Essrog, que está presente en casi todas las escenas, ya sea con una aparición en pantalla o con su voz en off, y que saca adelante de manera solvente el multifacético Edward Norton, que dirige, adapta el guion y protagoniza la película. No es fácil interpretar a un personaje que tiene síndrome de Tourette sin sobreactuar y Norton lo sabe hacer bastante bien. Entre los secundarios de lujo destaco a tres: Willem Dafoe como el ingeniero en horas bajas Paul Randolph y hermano de uno de los empresarios poderosos que controlan la ciudad, Bobby Canavale como Tony Vermonte, el jefe del protagonista en la agencia de detectives, y Gugu Mbatha-Raw como la activista en contra del racismo Laura Rose. Los tres lo hacen muy bien en cada una de sus apariciones.
La película se mueve entre el cine de gángsters y cine negro más clásico, en donde hay engaños, chantajes y nadie es lo que parece. La corrupción política, policial, los bajos fandos de la ciudad de Nueva York son temas que se abordan en el proyecto, y aunque no se terminan de desarrollar bien las dferentes subtramas, al menos nos deja a modo de pinceladas varios detalles que ponen de manifiesto ese modo de actuar de algunos malvados poderosos y corruptos, que acumulan una gran fortuna a costa de terminar con los que se oponen a sus planes maléficos.
Pero los grandes aciertos de la película son en los aspectos técnicos, en especial la dirección de fotografía de Dick Pope y la dirección artística, ya que se cuidan al máximo todos los detalles para situarnos de la manera más fidedigna en esa época.
Dejo para el final lo más destacado, y me refiero a la banda sonora compuesta por el británico Daniel Pemberton, que tendría que haber estado nominada al Óscar en esta categoría, y que es perfecta para la época en la que se desarrolla la película, y que es variada según el tipo de escena que estamos viendo. A todo ello hay que sumar esas escenas en el club de jazz con el actor Michael K. Williams (conocido por su papel de Omar Little en la serie "The Wire", y por sus personajes secundarios en otras series producidas por HBO) tocando la trompeta en unos momentos inolvidables para los aficionados a la música jazz.
Nos encontramos ante una película que dura casi dos horas y media, lo que está justificado, e incluso hubiera estado mejor con un metraje superior, para poder así desarrollar esas subtramas secundarias, y lo que no me convence es el desenlace del proyecto. Una película que puede tener su público, en especial los seguidores del género.
LO MEJOR: La música y las canciones. La recreación de la época.
LO PEOR: Algunos personajes no están bien desarrollados y no me convence el desenlace.
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Ricardo Pablo López en Destino Arrakis
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