EL PRECIO DE LA FAMA
DIRECCIÓN: Steven Cantor
INTÉRPRETES: Jade Hale-Christofi, Sergei Polunin
FOTOGRAFÍA: Mark Wolf
MÚSICA: Ilan Eshkeri
GÉNERO: Documental
PRODUCCIÓN: Stick Figure Productions, BBC Films, Baby Cow Films, Magnolia Mae Films
DISTRIBUIDORA EN ESPAÑA: Karma Films
DURACIÓN: 85 minutos
PREMIOS:2 nominaciones, una en los BIFA 2016 y otra en los PGA 2017
SINOPSIS:
Con asombrosa fuerza y aplomo, Sergei Polunin irrumpió en el mundo de la danza convirtiéndose en el más joven primer bailarín de la historia del Royal Ballet. Con 25 años, y en lo más alto de su carrera, abandonó, al borde de la destrucción personal a causa de la fama. Su talento, más que un regalo, fue una auténtica carga para él. DANCER es una mirada sin precedentes a la vida del joven que consiguió que el ballet se convirtiera en viral, transformando la imagen que tenemos de la danza clásica. ( Fuente sinopsis, cartel e imágenes: Karma Films )
( Fuentes información de la película: Filmaffinity, IMDb )
( Fuentes información de la película: Filmaffinity, IMDb )
CRÍTICA:
El productor y director Steven Cantor es el encargado de dirigir este largometraje documental británico, que es una especie de biografía del bailarín ucraniano Sergei Polunin, un niño prodigio que a los 19 años se convirtió en el bailarín más joven que logró el estatus de principal en el Royal Ballet de Londres. La carrera de Cantor está ligada sobre todo al mundo de la televisión, y consiguió 5 nominaciones a los premios Emmy por sus trabajos en programas de Tv. A nivel cinematográfico ha dirigido algún otro documental y su mayor éxito fue la nominación al Óscar en 1994 por el cortometraje documental " Blood ties: The Life and work of Sally man ( 1994 ) ", siendo derrotado por " Defending our lives ".
Este documental sonó entre los candidatos a nominaciones a los pasados premios Óscar, y al final se quedó fuera de la mayoría de premios de la crítica, así como de los premios IDA ( gremio de documentalistas ) 2016, y su única aparición fue al ser una de las nominadas en los PGA 2017 ( gremio de productores ).
Este documental sonó entre los candidatos a nominaciones a los pasados premios Óscar, y al final se quedó fuera de la mayoría de premios de la crítica, así como de los premios IDA ( gremio de documentalistas ) 2016, y su única aparición fue al ser una de las nominadas en los PGA 2017 ( gremio de productores ).
La propuesta aborda de manera certera la vida personal del bailarín, con la influencia de la separación de sus padres, que fue la causante de su atormentada vida personal, a lo que podemos unir sus amistades en la capital británica con las fiestas y el consumo excesivo de alcohol, y haber alcanzado la fama tan pronto al ser un niño prodigio. Se analiza su infancia, adolescencia y etapa adulta con unas imágenes de archivo y recopilación de vídeos que permiten conocer mejor a ese artista con mucho carácter.
Polunin ha sido uno de los grandes talentos en su profesión, pero su personalidad le hizo abandonar su sueño, por no soportar la elevada presión de los escenarios londinenses. Viendo que su vida estaba entrando en un círculo peligroso decide dejar este trabajo y trasladarse a Rusia, en donde con mucha menos presión formó parte de un concurso televisivo relacionado con su profesión.
Este largometraje aporta los datos necesarios, con anécdotas de su vida personal y profesional, para conocer mejor al protagonista, y es de gran calidad técnica.
Es fácil de seguir por un público medio, ya que aborda temas de interés cultural, y lo hace de manera que sea atractivo incluso si eres desconocedor de la danza. La puesta en escena y el tono del documental es bastante clásica, y no emplea recursos técnicos modernos, ya que no los necesita para el tipo de historia que está contando, y sabe mezclar de manera acertada las declaraciones del protagonistas, amigos y familiares con las imágenes de los momentos más importantes de la vida del protagonista.
LO MEJOR: La calidad técnica.
LO PEOR: Ser un documental con una puesta en escena bastante convencional.
ENTREVISTA A SERGEI POLUNIN:
¿ Cómo te sentiste cuando Steven Cantor te habló por primera vez sobre la idea de hacer DANCER ?
Los bailarines suelen tener el cuerpo muy pulcro pero tú tienes muchos tatuajes. ¿ Qué hay detrás de todos ellos ?
Cuando era pequeño solía hacerme dibujos en el cuerpo por lo que tenía claro que iba a tener tatuajes. Me gustaban y respetaba a la gente que los tenía, especialmente en la cara o las manos porque para mí representaban la libertad. No son la clase de personas que juzgan a los demás. En las escuelas de baile hay normas realmente
estrictas y una de ellas es no llevar tatuajes así que imagino que estoy rompiendo las reglas. Pero me siento bien.
Se te considera el “ chico malo ” del mundo del ballet.
¿ Decidiste crear esta imagen para desafiar las normas ?
Me aproveché de ello. Fue más bien cosa de los medios de comunicación pero decidí seguirles la corriente, aunque, en realidad, hizo que todo fuera más difícil porque a raíz de esa imagen nadie quería trabajar conmigo. Las grandes compañías preferían trabajar con alguien más seguro y predecible. Básicamente estaba cavando mi propia tumba.
ENTREVISTA A SERGEI POLUNIN:
¿ Cómo te sentiste cuando Steven Cantor te habló por primera vez sobre la idea de hacer DANCER ?
No tenía ni idea de cómo resultaría. Al principio sabía que quería rodar en distintos países y mostrar la belleza de las diferentes culturas pero, francamente, no sabía hacia donde iba a dirigirnos.
¿ Esperabas que el documental recibiera reacciones tan buenas ?
Pues no. Me sorprendió cómo la gente reaccionaba y estoy muy feliz por ello. Todo fue gracias a un equipo increíble y a una magnífica productora, Gabrielle Tana, que se convirtió en mi ángel de la guarda.
Tu coreografía de “ Take me to church ” se suponía que iba a ser tu último baile ¿ qué fue lo que te hizo continuar ?
La grabación del videoclip duró nueve horas y durante este tiempo pude pensar mucho y, de hecho, estaba convencido que iba a abandonar. Sabía que quería dejar de bailar y hacer algo distinto pero “ Take me to church ”
fue extremadamente emotiva y empecé a pensar en todo lo que dejaría atrás si abandonaba. Quizás me perdería cosas, quizás quedaba aún mucho por descubrir. Después me marché a Rusia y bailé por libre durante unos meses para recordarme a mí mismo la razón por la que bailaba.
Pues no. Me sorprendió cómo la gente reaccionaba y estoy muy feliz por ello. Todo fue gracias a un equipo increíble y a una magnífica productora, Gabrielle Tana, que se convirtió en mi ángel de la guarda.
Tu coreografía de “ Take me to church ” se suponía que iba a ser tu último baile ¿ qué fue lo que te hizo continuar ?
La grabación del videoclip duró nueve horas y durante este tiempo pude pensar mucho y, de hecho, estaba convencido que iba a abandonar. Sabía que quería dejar de bailar y hacer algo distinto pero “ Take me to church ”
fue extremadamente emotiva y empecé a pensar en todo lo que dejaría atrás si abandonaba. Quizás me perdería cosas, quizás quedaba aún mucho por descubrir. Después me marché a Rusia y bailé por libre durante unos meses para recordarme a mí mismo la razón por la que bailaba.
Los bailarines suelen tener el cuerpo muy pulcro pero tú tienes muchos tatuajes. ¿ Qué hay detrás de todos ellos ?
Cuando era pequeño solía hacerme dibujos en el cuerpo por lo que tenía claro que iba a tener tatuajes. Me gustaban y respetaba a la gente que los tenía, especialmente en la cara o las manos porque para mí representaban la libertad. No son la clase de personas que juzgan a los demás. En las escuelas de baile hay normas realmente
estrictas y una de ellas es no llevar tatuajes así que imagino que estoy rompiendo las reglas. Pero me siento bien.
¿ Decidiste crear esta imagen para desafiar las normas ?
Me aproveché de ello. Fue más bien cosa de los medios de comunicación pero decidí seguirles la corriente, aunque, en realidad, hizo que todo fuera más difícil porque a raíz de esa imagen nadie quería trabajar conmigo. Las grandes compañías preferían trabajar con alguien más seguro y predecible. Básicamente estaba cavando mi propia tumba.
Cuando eras más joven, ¿ qué querías ser ?
Siempre he querido ser boxeador.
¿ Sientes que los medios de comunicación han sido parte importante de lo que eres hoy en día ?
Definitivamente sí. Especialmente Internet y YouTube.
¿ Cuál ha sido tu mayor reto hasta la fecha ?
Tengo muchos objetivos en mente. A veces es difícil porque aún quiero bailar. Tomo clases de baile a diario pero también quiero es- tudiar interpretación y trabajar en el mundo de la coreografía. Estoy
poniendo en marcha mi propia compañía llamada “ Project Polunin ” para ayudar a los bailarines con sus carreras y seguir impulsando la danza. También voy a aparecer en una película. Es un reto porque hay tanto que quiero hacer tan extremadamente emocionante...
En el documental mencionas que en tu época con el Royal Ballet sentías que conseguirías tu máximo potencial con la compañía y siempre te esforzabas por conseguir más. ¿ Sigue siendo así ?
Ahora mismo estoy en el momento en el que me hubiera gustado estar cuando tenía 19 años. Si echamos la vista atrás, eran los medios de comunicación los que me hacían ser un chico malo en vez de escuchar lo que verdaderamente yo les estaba contando. También me olvidé de escucharme a mí mismo sobre lo que originalmente había decidido que iba a hacer. Pero ahora sí estoy haciendo lo que entonces intentaba hacer y en lo que de verdad creo. Me gusta la creación y hay muchas cosas emocionantes que buscar como artista. Estoy en el camino correcto. Solamente deseo que no sea muy largo de recorrer para conseguirlo.
Has dicho que vas a aparecer en una película. Háblanos de ello.
Es una película comercial, de Hollywood, pero aún no puedo contar mucho más. ¡ Va a ser muy interesante !
¿Te ves en Hollywood ?
Si yo lo eligiese, ¡ por supuesto que sí ! Definitivamente es lo que ahora mismo quiero hacer.
¿ Qué otras cosas aparte de la danza te inspiran ?
Ahora mismo el cine. Mickey Rourke es una gran inspiración en mi vida. También Johnny Depp. Pero más por lo que son en la vida real que por lo que son en la pantalla.
¿ Estás deseando irte a Nueva Zelanda el año que viene ?
Iré a bailar con Natalia Osipova, una de las primeras bailarinas del Royal Ballet. Me encanta la naturaleza, es una de las cosas más importantes en nues- tras vidas, y he oído que Nueva Zelanda es un país precioso así que estoy muy emocionado con esto también.
¿ Algún consejo para los jóvenes bailarines que están comenzando ?
Les diría que consiguieran un manager o agente y también que trabajaran mucho pero asegurándose de que también viven.
¿ Qué crees que el futuro depara para el ballet ?
La danza es verdaderamente importante para todo el mundo porque es algo internacional y habla un idioma que se entiende en todos los países. Creo que tiene que venir un gran cambio. Espero que la industria llegue al mismo nivel en el que están el deporte o el cine porque creo que es posible. El fútbol no estaba en el nivel que está hoy en día hace 15 años, así que estoy expectante de algo grande. ( Fuente texto entrevista: Karma Films )
TRAILER: